LA SOMBRA



¿Qué sucede cuando la distancia entre la culpa y el arrepentimiento convergen en un punto perteneciente a una misma línea trazada invisiblemente en el aire? Se lo preguntó dormido, despierto, enderezado, chepado, cansado, sonriente, sobrio y etílico.

La sombra a veces no avanza cuando siente vergüenza ajena, y se quedó fuera de aquella puerta. Entró para pedir perdón, no esperaba nada a cambio, el vaso se había derramado y había inundado la habitación, debajo de la alfombra que había creado la capa de agua si se observaba estaba todo enmohecido, los momentos de juegos de mesa, los del último cigarro antes de irse a dormir, los de los abrazos, los de las miradas cómplices, los de los secretos que ya no eran tales.

Cuando salió de allí, no solo le estaba esperando su sombra, si no tuvo la sensación de que había un montón de periodistas con sus cámaras, con sus grabadoras pidiéndole explicaciones, preguntas fuera de lugar que incomodaban, se los apartó con varios empujones sin llegar a una agresividad que provocase un conflicto que estaba a punto de bullir, se subió a la moto, esperó a que la sombra subiese en el asiento de atrás y arrancó creyendo que así se liberaba de todo el peso que le había encogido, soltar el sabor agridulce que le ensuciaba el aliento, hasta que cuando salió de la ciudad se dio cuenta que le faltaba hacer una última cosa, paró en el arcén, y echó a la sombra del asiento de detrás, ahora sí que podía seguir tranquilo su nuevo camino.

Saludos y gracias

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