¿POR QUÉ A LAS CHICAS LES GUSTAN LOS CHICOS MALOS?



Hubo un tiempo que leía comics con asiduidad, las historias de Shakespeare se me metieron en la cabeza igual que lo hizo el blanco y negro de Casablanca, y todavía hay días que me digo a mí mismo Sam toca esa canción, Sam vuelve a tocar esa canción, pero que terrible es descubrir que ya no hay canción para tocar, maldita sea ni tan siquiera eso, ni tan siquiera queda una canción.

Hubo un tiempo que pensaba que si me ponía una capa solucionaría todos los problemas del mundo, que existía alguien por la quien merecía tomar si hiciese falta del mismo veneno que tomaron Romeo y Julieta, interrogarme una y otra vez porque el Titanic tuvo que chocar contra el iceberg, ¿Por qué? ¿Por qué no lo pudo evitar? Y también creía en la revolución y el pañuelo del Che Guevara.

 Hubo un tiempo que Julia Roberts para que nos entendamos era eufemismo de prostituta, y eran muchos los sábados por la noche que me dejaban clavado en un bar haciendo pleno en la desesperación del dolor de huevos que pensaba muy seriamente de  acercarme a alguna esquina y enamorarme de alguna pelirroja que te follase por cincuenta euros pero que no se dejase besar la primera noche, y al final lo único que pasaba es que antes de llegar a casa serpenteando por las calles de Valencia me asaltaba la duda de dónde estarían los extraterrestres de Spielberg.

Hubo un tiempo que si me ponían un sombrero de gánster en la cabeza estaba dispuesto a hacer del hijo de Corleone y comenzar mi imperio atracando una caja de ahorros que ya por entonces empezaba a dudar a donde nos llevaría tanto ladrillo y especulación, y que si lo que le gustaba a las chicas era un chico malo a lo James Dean, aunque quise intentarlo nunca serví para eso, tal vez, tal vez por eso y porque no me gustaban las lentejas quería explicarme argumentando que quizás ese (este) mundo no estaba hecho para mí.

Ahora tanto tiempo después lo que sucede no es que las cosas cambien sino que somos nosotros que ahora hemos aprendido a verlas por diferentes prismas y ángulos, pero aún así no sé si por la nostalgia o la falta de cigarrillos (que lo dejé por enésima vez) una pregunta me sigue rondando como una mosca cojonera, ¿por qué a las chicas les gustan los chicos malos?

Saludos y gracias

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