Mañana que es esta noche son
muchas las personas que dormirán solos. Lo dice una estadística que ha hecho
una hoja Excel, propongo hoguera y fuego con esos terribles números, y porqué
no llevarles la contraria, engañarlos. Hoy no me levanté tierno y dulce como un
osito de peluche que busca el abrazo. Hoy ha sido un día raro. Debes de saber
que los días extraños provocan que el equilibro se ponga en duda, como subirse
en un balancín y columpiarse contra las dudas y los reveses, siempre, siempre
llevar la contraria. Por eso son las once y media de la noche y son muchas las
cosas que prefieren moverse con el corazón y desertar de la razón, que la
cabeza hace tiempo que está cansada de crear muros mentales y nudos en el
estomago. Todavía me pregunto por qué no quieres entender las canciones que pongo
y has decidido dejarme mudo y no decirme nada. Que yo los mundos virtuales para
enamorarse o hacer el amor cada vez los entiendo menos y los aborrezco con el
paso de las actualizaciones de los software.
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