Era extrañarse como lo
hacíamos, y lejos ya quedaba la frontera francesa, cuando salí a buscarte
porque pensaba que en mis dedos habían surgido alas, pero no sé porque nunca
llegaba a tiempo, y si había algo que necesitaba era quedar contigo como esos
domingos donde me decías por mensaje de texto, dime que puedo ir a visitarte y
empezar la semana despertándome a tu lado, y entonces todo estaba claro las pócimas
de las brujas sí que funcionaban, por eso igual que cuando te encontré la
primera vez supe esa misma noche que era lo que buscaba, seguramente es más que
suficiente para ir de nuevo detrás de ti, tan solo espero no llegar tarde esta
vez y que tú me estés esperando.
Saludos y gracias
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