MIENTRAS PLANCHABAS

Te gustaba mientras planchabas poner de fondo “Los puentes de Madison" e imaginar que igual que un cometa, se te cruzaba un forastero por el camino y te hacía sentir que existías, que te regalase en frascos pequeños que todavía hay mundos perfectos esperando a que llegue el día que los encontremos para comenzar a habitarlos. Y que no, no deben de estar muy lejos.

Que las noches que te quedabas sola en casa, él había encontrado la nota que le habías dejado en la vieja camioneta, y a escondidas te hacía una visita, tú te ponías tu mejor vestido, sintonizabais alguna emisora, y alrededor de la mesa puesta, os poníais a bailar lentamente, y envueltos en el silencio de las palabras que no son necesarias decir, te hacía el amor encima del tocador, desquebrajando así los tristes recuerdos que se quedaron guardados detrás del espejo.

Luego te contaría lo hermoso que es África, y que al mundo le envuelve una belleza extraña, la cual nos debería estar permitido a todos, no tan solo a unos pocos, tocarla al menos una vez con las puntas de los dedos. Y después llegaría ese momento que nunca se está preparado, el de las despedidas que no podemos evitar, quedándote con las ganas de saber que si se lo hubieras pedido te hubiera llevado con él, pero que es imposible, porque te acabas de dar cuenta que todavía queda un montón de ropa arrugada.

Saludos y gracias