Compras un gato, tarde.
Cuando todo está cerrado
y las gaviotas descansan
de robar niños abandonados.
Compras un gato porque recuerdas
a ella en el ático
¿Cuántos años hace?
sentada y con los pies
colgando.
Compras un gato y se suicida
un creyente de si no tienes
trabajo no tienes nada
ni dignidad.
El colapso es grande.
Las cosas las han puesto -
Cuesta arriba - Prefieres cuesta abajo - ¿A qué sí? Eso te diría desde el plano
de sus 180 grados, desde el lugar al cual pertenece.
Compras el gato porque recuerdas
la longitud de su sonrisa y
los duendes
I que te avisaban - III Nada volvería a ser lo
mismo
II que si la mirabas - IV Y tú
corrías detrás de ella
Y ella en el paseo. En la
planicie. En el llano.
Viendo como ibas rodando cuesta abajo para decirle
que eras feliz.
Viendo como ibas ahogado
cuesta arriba en su búsqueda cuando se iba sin despedidas.
El colapso es grande.
Dicen sin decirlo y diciéndolo
que el mundo y la vida duele mucho más que hace seis meses.
Todo
anda denso. Pesado. Triste. Rómpelo. Romperlo de una
vez
y cambiar el mundo por
otro.
Compras un gato porque
necesitas seguir viviendo
creyendo
esperanzado.
Saludos y gracias
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