Hay días que no salen como te
gustaría. Nadie responde a tus llamadas, ni contesta a tus mensajes, todos tus
planes son ahora trozos de papel abandonados en el agua de la bañera en la cual
te sumerges vestida queriendo quitarte la respiración por unos instantes. Creer
en los ángeles ese mal vacio...
Sales empapada, con las luces
apagadas te sientas en un rincón de la habitación grande y recuerdas cuando
caminabas con los pies descalzos, llevabas falda y tus piernas desnudas hacían
en él el mismo efecto que el cantito de unas sirenas, cavernas desconocidas
donde entrabáis sin tener miedo y como se enamoraba de ti porque te veía tan
feliz jugando de nuevo a la rayuela de la misma manera inocente que lo hacías
cuando eras una niña.
Saludos y gracias
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