Seamos cursis que la canción
de verano ha llegado hasta nuestras entrañas, aunque las balas de goma y los
gases vuelen en Turquía, vayamos a la discoteca quitémonos la ropa en el cuarto
del baño y follemos como en las películas de los sábados por la tarde que te
metía mano entre tu falda de cuadros de colegiala, qué más da si arde Brasil
porque se dieron cuenta que el fútbol es una cortina de humo y mucho más, ven
el domingo a casa de mis padres que hay paella y quieren conocerte y te
ensañaran la portada del ABC para enseñarte un mundo fantástico lleno de
dictaduras y seres impresentables que los coronan como héroes detrás de monarquías
y otros poderes, no les daremos cuerda a que en Grecia siguen luchando por no
pasar hambre, que el mundo se cae a pedazos, que tendríamos que dejar este café
y dejar de hacer chistes por lo que pasa últimamente.
Que te imaginas que por ti
volé tres metros sobre el cielo con chupa de cuero, y eso es lo único que
necesitas en el mundo y en las películas que hay que pagar un alto precio por
su entrada, llevarte en moto saltándome los límites de velocidad hasta la playa
y no preocuparse de los pobres que ocupen los raíles de metro vacios de Madrid
y otras ciudades, tomar un helado y que te escriba aunque estés enfrente un
mensaje al móvil con un te quiero y una flecha clavada en un corazón, y mande
un beso al cielo para que lo cojas con tus manos y lo poses sobre tus labios,
que ese el mundo que queremos, porque si nos desnudamos en una casa encantada
con piscina llena de hojas de árboles que murieron esa será nuestra libertad y
qué más da si la única toalla que te tapa son los colores de un país que ayuda
a reventar este mundo, porque tú estás a mi lado, y cuando un día decidan por
ejemplo entre muchas otras cosas desahuciarnos de donde vivamos no sabremos
encontrar respuestas mientras la gente está en la calle para pedir algo más que
respuestas.
Saludos y gracias
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