Hace unas semanas tuve la oportunidad de ver “The visitor”, una película muy interesante y con una humanidad propia. La historia es preciosa, sencilla, sin rocambolescos giros arguméntales, pero acertada. Una manera muy ingeniosa de ver el tema de la inmigración, una forma más de decirnos que tratar a alguien diferente por pertenecer a otro país es un error. Siempre me he dicho que muchas veces nos cuesta ver más allá, quitarnos la maldita venda que nos cubre los ojos, y darnos cuenta que somos más iguales de lo que creemos, quitar las capas culturales de por medio, las de las diferentes costumbres, las del lenguaje verbal que muchas veces no nos permite comunicarnos como quisiéramos, y así para poco a poco quitárnoslo todo, desde los prejuicios hasta los ropajes, y quedarnos en pelotas, tanto hombres y mujeres, de diferentes países, fronteras, blancos, negros, moros, cristianos, chinos, etc....haber si así de una vez por todas, sin nada que nos proteja, tan solo tal como venimos al mundo y observandonos mutuamente, sin hablar nos damos cuenta que tenemos más cosas en común que nos una, que cosas que nos diferencien y nos obligue a tratarnos como extraños. Somos más iguales de lo que pensamos, tan solo nosotros con nuestras pajas mentales creamos grandes distancias allí donde nunca tenían que haber existido.
Saludos y gracias
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