De fiesta en fiesta y tiro porque me toca

Esta semana he vuelto por unos andares que desde hace unos cuantos años no repetía, es decir desde Lunes a Sábado ambos días inclusive de fiesta sin parar. Se junto que esta semana teníamos despedida de grupos con los alumnos, con un partido ridículo para la historia de la selección española de fútbol, junto con la visita agradable por parte de compañeros de Varsovia, más el colofón de un cumpleaños el Viernes y la gran fiesta que organizó la escuela para cerrar el curso por este año. Aunque en verano hay trabajo, y se imparten clases de intensivos. Es decir, que si todo va bien, me quedare por aquí trabajando y mi vuelta a mi tierra querida se aplaza para un futuro indeterminado. Por descontado las ganas de volver, y disfrutar de nuevo con los amigos entre cañas y tapas.

Hablar de esta semana, como si fuera un diario, cronológicamente, y contando con detalle lo más destacado de cada día, resultaría espeso, denso y os aburriría a vosotros y me aburriría a mí. Así que simplemente destacare esas pequeñas curiosidades, y esas pequeñas enseñanzas y quizás alguna que otra anécdota de estos seis días.

- Me llama la atención y me llena de envidia sana la capacidad que tiene el ser humano cuando es pequeño de crecer aprendiendo con dos idiomas, e incluso tres y con un dominio envidiable. Esta semana conocí dos casos, una chiquilla de once años, y un chaval de tres.
- La capacidad de ingerir cerveza, es tan suave, entra tan bien, es tan linda........claro esta me refiero a la buena cerveza, y en este caso la cerveza Polaca lo cumple con creces.
- Cada día entiendo más porque los polacos o polacas que conocen y han estado en España se enamoran y la echan tanto de menos. Cada día entiendo menos porque algunos españoles que viven en Polonia y la comparan con España, parece que Polonia sea perfecta y España no le llegue ni a la suela de los pies........
- Ahora comprendo porque la tentación vive arriba, y aunque uno tenga los pies sobre la tierra, a veces le apetezca hacer locuras con las cuales se corren grandes riesgos de perpetuar normas “Éticas” y romper formalidades y formalismos.
- Las polacas son muy bellas.
- Me encanta escandalizar, pero para ello algún día hablare de la ley del escándalo. Pero me he dado cuenta que no me gusta escandalizarme a mí mismo.
- Trabajar en un trabajo que una vez más me reaprueba que te ofrece y te regala muchas más alegrías que tristezas.
- El grupo humano de compañeros, son formidables, e incluso me atrevería a decir que más que compañeros.
- Saber que a veces queremos dos cosas incompatibles de tenerlas a la vez, y se tiene que elegir, o blanco o negro. ¿No decían que siempre había un gris por medio? ¡Pues no lo encuentro!
- Habérmelo pasado tan bien durante seis días seguidos y esta vez no tener que arrepentirme de nada.
- Saber cuando despedirme de este post. Muchas gracias por estar ahí detrás, disfrutar y cuídense.




Saludos y gracias

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