MUDANZAS Y H2O

Ya nos encontramos de nuevo a Lunes por la mañana, con las pilas totalmente cargadas para empezar otra semana que al menos sea tan satisfactoria como la anterior, pero también me permita coger un poquito más de aire y encontrar más tiempo para mí. Aunque por supuesto con las prioridades claras, y los objetivos a cumplir más que presentes. Este último fin de semana ha sido de órdago, él viernes tras acabar las clases me fui con un colega del curro y Annia a tomar cervezas a un local que se llama “El camarón”, lo lleva Sergio, un tío muy simpático que siempre que vamos allí nos ofrece un poco de su tiempo para acabar como casi siempre hablando de las delicias de la cocina española. Por suerte para un servidor, aparte de comida polaca también podemos encontrar allí comida española, y este viernes recordé viejos tiempos con un bocadillo de lomo y queso que estaba para chuparse los dedos. Para rematar la noche nos tomamos una última copa “En la casa de la música” otro lugar habitual entre los que me muevo, donde se encontraban unos conocidos que hacía tiempo que no veía. El sábado después de levantarme, y ver “Watchmen”, ayude a un compañero de trabajo a hacer la mudanza de un piso a otro. Acabe reventado pues se trataba de subir los trastos hasta un quinto sin ascensor, y no es que hubieran pocas cosas....porque al menos es o tanto o igual de trastero que yo. Pero a pesar del esfuerzo físico, resulto gratificante poder echar una mano. Luego nos fuimos unos cuantos compañeros de trabajo más, junto a sus respectivas novias a tomar unas pizzas, la cena estuvo bien, entre risas y alguna que otra tontería nada lucrativa producto del cansancio y viejas historias adornadas con guirnaldas más por el mero hecho de hablar que mantener la boca cerrada, un servidor intento mantener en pie la velada y creo que en cierta manera lo conseguí. Después fuimos al “H2O” el primer Púb. discoteca de homosexuales que encuentro en Wroclaw, había una novedad que me encanto, mandabas mensajes por el móvil a un numero que te indicaban en una pantalla y aparecía el mensaje en dicha pantalla, si, lo sé, se trata de una “gilí pollez” pero a veces esos pequeñas detalles ayudan a hacer más entretenida la noche. Así que imaginaros de vez en cuando entre multitud de mensajes escritos en polaco, algunos que dejamos caer en español de cachondeo, para concluir la noche entre risas y buen rollo.

Saludos y gracias